Morgan Rogers vio cómo se anulaba un gol tardío para el Aston Villa mientras el equipo de Unai Emery se veía limitado a un frustrante empate sin goles con la Juventus en la Liga de Campeones.
Emery, que ahora está soportando su racha más larga sin una victoria como jefe de Villa desde que asumió el cargo de Steven Gerrard en 2022, solo pudo observar desde la barrera cómo sus jugadores fracasaban en el último tercio.
Lucas Digne estuvo cerca de abrir el marcador después de que su tiro libre rozara el travesaño justo antes del descanso. Ollie Watkins también amenazó, pero su disparo fue negado por Michele Di Gregorio en la portería de la Juventus.
La tensión en Villa Park siguió aumentando con el paso del tiempo, pero también la decepción. A los anfitriones les faltó ventaja en el último tercio, lo que ha sido un problema persistente durante esta caída de forma que ahora se extiende a siete juegos.
La Juventus representó poca amenaza durante la mayor parte del partido, pero cuando lo hizo, Francisco Conceicao estuvo involucrado. El brazo extendido de Emiliano Martínez fue lo único que impidió que el número 7 pusiera a su equipo en cabeza poco después de la hora.
Di Gregorio fue llamado a la acción nuevamente para rechazar a John McGinn desde corta distancia, pero finalmente los anfitriones no hicieron lo suficiente en el último tercio y casi aguantaron a la defensiva.
Morgan Rogers pensó que había conseguido la victoria en las brasas moribundas del partido, pero sus celebraciones se vieron truncadas, después de un largo período de confusión en el estadio, por una falta en la preparación. Una decisión que no hizo más que agravar la miseria del público native.
Ahora pensaremos en cómo Emery y su cuerpo técnico pueden abordar este preocupante momento de forma, pero la perspectiva de hacerlo en el Chelsea, en vivo por Sky Sports activitieseste fin de semana es desalentador.