José Mourinho insiste en que sólo quiere que prevalezca la “justicia” tras los comentarios de Pep Guardiola acusando al ex técnico del Chelsea y del Manchester United de exigir que el Manchester Metropolis sea relegado como castigo por 115 cargos de la Premier League.
El Metropolis espera un veredicto sobre las numerosas supuestas violaciones de las reglas financieras, con sanciones potenciales teóricamente ilimitadas si el membership es considerado culpable de irregularidades. El membership siempre ha protestado por su complete inocencia y la audiencia de varias semanas llegó a su fin en los últimos días.
Mourinho había irritado a Guardiola al sugerir que ganó sus tres títulos de la Premier League con el Chelsea. “justa y limpiamente”lo que implica que el dominio del Metropolis no ha sido tal. Los cargos se refieren al período comprendido entre 2009 y 2018, durante el cual Guardiola ganó el primero de seis títulos.
En respuesta, el técnico del Metropolis afirmó que Mourinho, quien anteriormente también dijo que el Manchester United le debería una bonificación si el título 2017/18 terminaba siendo entregado retrospectivamente al membership de Previous Trafford, quería ver a los Sky Blues obligados a descender a la Liga. Una o una división aún inferior.
“No es cierto que quiero hombre de la ciudad descender”, dijo Mourinho antes de que su equipo Fenerbahce se enfrentara al Athletic Membership en la Europa League, mientras se le volvía a plantear el constante tira y afloja.
“Es cierto que me gusta la justicia, y muchas veces los clubes pequeños son castigados con 5€, 10€ más del presupuesto y de las reglas del Honest Play Financiero. Por ejemplo, sufrí en la Roma tres años con una gran limitación. No creo Es justo que los grandes tiburones financieros siempre encuentren una manera de escapar de las reglas.
“Soy simplemente un hombre de fútbol, un hombre que ama el fútbol, más que ser un jugador de fútbol profesional soy muy apasionado, simplemente me gusta la justicia en el fútbol. Pero aparte de eso, no hay malos sentimientos”.
Mourinho y Guardiola se convirtieron en archienemigos a principios de la década de 2010, cuando sus respectivos equipos Actual Madrid y Barcelona luchaban por la supremacía española y europea. Hubo una serie de incidentes feos, pero Mourinho insiste en que ahora no hay rencor, señalando que su relación en el fútbol se remonta a casi 30 años de trabajo juntos.
“Estuvimos juntos durante tres años (en el Barcelona). Yo period asistente y él period jugador. Me gusta mucho y él lo sabe. Le gusto y lo sé, no hay problemas entre nosotros. Una cosa es palabras y otra cosa son los sentimientos profundos”, afirmó.